lunes, 27 de junio de 2011

Extrañas necesidades humanas... o al menos, mías.

Como adicta a internet que soy y admitiendo dicha adicción, no tengo pudor en reconocer que tengo la costumbre de crearme un perfil en casi cada red social de la que tengo conocimiento, desde myspace hasta facebook, desde Twitter hasta MOG (de música), aunque muchas las abandono y termino usando las mismas de siempre, las que usamos todos…

Sé desde siempre que mi búsqueda eterna está completamente centrada en la obtención de un espacio personal donde expresarme, donde poder ser yo, etc., supongo que tiene que ver con mi vena frustrada de pseudoartista o al menos eso me gusta creer.

Pero mi último perfil en una red social me hizo pensar que tal vez la intención principal mía, y la de todos, para qué mentir, es realmente la de buscar un espacio personal para satisfacer la necesidad de ser individuos que se expresan, con un amplio mundo interior que quieren dejar salir y compartir, como dije anteriormente, pero rápidamente caemos en la tentación de conseguir más ‘amigos’, ‘followers’… y entonces es cuando comenzamos a, de alguna manera, poner la foto/ frase/ actividad/ canción/ etc. que sabemos que va a gustar para, la necesidad más social de todas, ser aceptados por los que nos rodean, entrando nuevamente en el círculo en el que necesitamos satisfacer a los demás para cerciorar nuestra valía y así, satisfacernos a nosotros mismos.

Hoy estuve pensando en eso.

martes, 21 de junio de 2011

Abandonarlo todo...




¿Nunca se te ocurrió abandonarlo todo? Seguro que si, a todos se nos cruzó por la cabeza alguna vez, a algunos se les cruzó demasiadas veces, en otros ese es el pensamiento principal y lo demás son puras distracciones momentáneas.

Abandonarlo todo y dormir de día, vivir de noche, vivir en serio. Abandonar las reglas que alguien más escribió para vos, y escribir las tuyas, las que se ajustan a vos, a tu tiempo y tus deseos.

Abandonar a aquellas personas que parecen confabuladas para amargarte el día, esas personas que no saben más que criticar, es que… no saben más que criticar.

Escaparte de los pensamientos negativos, que te aturden, que te taladran el cerebro, que te ganan y te hunden.

Escaparte lejos de las responsabilidades, de jefes, autoridades… escaparte sin más, sin dar explicaciones a nadie, sin salir con un mapa marcado o un plan decidido.

Salir, irte, escaparte… SER LIBRE de una vez por todas. Empezar a descubrir lo que significa ser libre, de una vez por todas. SER VOS de una puta vez.

Y despreocuparte por si los días salen lluviosos o soleados, si los supermercados abren ese día, si de 20h a 8h es más barato hablar por teléfono, si los políticos son una mierda (siempre lo van a ser), si llegas a fin de mes con el dinero, si el alquiler es demasiado caro o si por algún lado, algún avivado te está robando (siempre va a ser así).

Abandonarlo todo, escaparte, tener a la música como única compañía… y ser libre.

Deshacerte de los cánones, de las malas miradas, de los dedos que señalan…

Abandonalo todo, decidite, lo venís pensando hace demasiado tiempo, lo venís deseando hace demasiado tiempo.

Abandonalo todo, cede al impulso de levantarte ahora mismo de la silla, salir por la puerta y no volver nunca más.

Abandonalo todo, transformate, muta, elegí, escapá, volvé, soñá…

Se te ocurrió demasiadas veces como para que ahora digas que no.

jueves, 2 de junio de 2011

I (L) self- destruction.

Me quise poner a escribir, pero ante la falta de inspiración me puse a buscar entre mis documentos y encontré esto, escrito un año antes, pero tan actual hoy como entonces...

Aferrada al pasado

A las cosas que con seguridad no podré conseguir

Que fría se vuelve la pantalla del ordenador cuando ya ni el mundo en tus manos es suficiente para entretenerte, para llenarte, para hacerte sentir que existís en algún lado, aunque sea en un lugar que no tiene puerta de salida ni de entrada.

El mundo se torna oscuro una vez más, cuando hasta mi imaginación se me tira en contra.

Y es otra vez lo mismo, el ciclo se repite otra vez, y una vez más me encuentro recurriendo a las mismas palabras que expresan los mismo sentimientos, que evocan una vez más, los mismos recuerdos de siempre.

Hasta yo me aburro de la falta de originalidad de estas líneas, pero es que mi vida es carente de toda sorpresa que pueda dar un sentido diferente a las letras que sin ningún cuidado tecleo, casi sin mirar, casi sin pensar; volviendo atrás si me equivoco, viendo cuanto más fácil son las cosas sobre el papel, o lo que sea.

Tantas veces choco contra la misma realidad, que ahora el problema es también lograr ver ¿cómo es que todavía sigo tan ciega? Camino sin rumbo, lucho contra un enemigo que ya no conozco, no distingo mi causa, y no veo el final. Y la verdad es que ya canso…

Y la verdad… la verdad es que ya no se qué hacer, ni para donde correr, ya no se qué es lo que quiero, ni dónde empezar a solucionar los problemas. Y lo peor… lo peor es que ya no sé ni cómo me siento como para seguir escribiendo.


Supongo que el hecho de que hace un año me sintiera igual que hoy no habla muy a mi favor...